Entonces, ¿cuál es el problema con tener miedo a volar?
El miedo surge a partir de un peligro que percibe nuestra mente. Esto significa que, para sentir miedo, el peligro no tiene por qué ser real, sino que basta con interpretarlo como tal. Normalmente, sentimos miedo ante situaciones realmente peligrosas (un incendio, nos entran a robar, terremoto, etc.), pero no siempre ocurre así.
Esto nos sucede si tenemos miedo a volar en avión. Objetivamente, volar es una actividad muy segura, pero nuestra mente no lo interpreta así, por lo que intenta hacer todo lo posible – creándonos miedo y ansiedad- para desanimarnos a volar. Si al final nos animamos, lo que para muchas personas puede ser un vuelo muy agradable, para nosotros puede ser una pesadilla: